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Ya habíamos estado aquí en otras ocasiones, sobre todo para disfrutar del baño final en las templadas aguas de el embalse, pero esta vez decidimos hacer la ruta al contrario, en sentido antihorario y fue mejor, tanto por la sombra de las sendas, como de la pendiente y que la zona de baño la encontramos a unos 500 metros de finalizar el recorrido, sin tener que hacer un pequeño ida y vuelta.
