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Este sábado subiríamos al Pico Espadán por una senda que aún no habíamos utilizado. Hay tantas formas de subir que da mucho juego y elijas la que elijas, Espadán nunca defrauda.
Comenzaríamos en esta ocasión desde Aín para subir por la "senda directa" a la Penya Pastor, caminar por el cordal hasta el Gurugú y desde ahí al Pico Espadán, volviendo por la senda lateral hacia el aljub y el Collado de Íbola. Visitaríamos el Castillo de Aín y regresaríamos a la población.
A la cita acudieron Mari, Pili, Jose, Juan Carlos, Nolo, Manuel Carlos y un servidor, y un poco antes de las 8 ya estábamos en el lugar de inicio dispuestos a disfrutar de una buena mañana de montaña.
Comenzamos caminando un poco por la carretera para salirnos después por la derecha en un recorte que se le hace a una curva.
Y después ya nos metimos en materia, saliéndonos por la senda de la izquierda.
La senda es una maravilla y poco a poco va cogiendo inclinación de manera constante, hasta que se hace bastante empinada.
Al ganar altura rápidamente, enseguida comenzamos a poder disfrutar de muy buenas vistas, en un día que se conservaba bastante claro.
A simple vista podíamos ver hoy las Islas Columbretes, que quedaban completamente nítidas acercándolas con el zoom de la cámara.
Con la constancia del pasito a pasito llegamos hasta arriba. Allí nos esperaba el cartel caído de la Penya Pastor. Subimos a ella por la izquierda pero no llegamos a una cumbre como tal, ya que se encuentra ocupada con carrascas altas y volvimos de nuevo al collado.
Nuestro siguiente objetivo era el Gurugú, aquella elevación en la que nos esperaba ese hito de piedras que aumentamos con la cámara.
Continuamos nuestro recorrido ahora por el divertido cordal por donde la senda va serpenteando y hay que ir guiándose por las fitas de piedra.
En un momento cruzamos al otro lado del cordal, a la parte izquierda para pasar junto a unas cuerdas quitamiedos que hay instaladas. Ningún problema. También se puede pasar por la parte de la derecha.
Una vista atrás para ver la Penya Pastor recién visitada llena de carrascas en su parte superior.
Continuamos para bingo.
Y llegamos al Gurugú. Muy buenas vistas desde aquí también.
Pero veíamos al Pico Espadán todavía lejos. Allá se ve esperándonos y acercándolo con el zoom se podía observar brillando la pequeña cruz acerada que lo culmina.
Mientras, en la cima del Gurugú, Juan Carlos oficiaba una especie de celebración..: "Yo os declaro...":)
Por aquí más o menos paramos a almorzar disfrutando de este maravilloso entorno.
Al fondo el Embalse de Sitjar y Ribesalbes, donde estuvimos la semana pasada.
A lo lejos parecía que algo llamaba nuestra atención y al acercarlo vimos que era la nieve caída esta semana por la zona de Javalambre.
Y llegamos a la cumbre de Espadán que, afortunadamente la encontramos toda para nosotros. Al momento llegó una pareja de senderistas y les pedimos que nos hicieran la foto de grupo.
Volvimos un poco sobre nuestros pasos por la senda por la que habíamos venido para bajar por otra que va por el medio de la ladera y así no tragarnos la pista de regreso. Mucho mejor por aquí.
Poco más se les puede pedir a estas maravillosas sendas.
Llegamos al cruce del Aljub y continuamos recto.
Llegamos al Collado de Íbola y cogimos la senda que nace en el exterior del quitamiedos de la carretera.
Abajo del todo nos apareció el desvío por la derecha para visitar el Castillo de Aín o de Benalí.
Volvimos a la senda y continuamos por ella hasta pasar por El Arquet, como hace unas semanas en que hicimos la ruta del Batalla y llegamos a la población, donde volvimos a visitar el bar de la plaza y a degustar esas Voll-Damm bien fresquitas.
Las fotos tan bonitas como la ruta.
ResponderEliminarRecord de fotos al Peñagolosa.