Para este sábado yo había decidido hacer una ruta que tenía pensada, ya que Kiquet en principio me había dicho que no iba a salir, pero a principios de semana me mandó un correo diciendo que sí que se animaba. Publiqué la ruta en mi blog por si había más gente interesada en salir y al final fuimos 8 los que nos reunimos. Algunos no coincidiamos desde hacía bastante tiempo y nos alegramos mucho de volver a caminar juntos.
Toni no hubiera faltado a la cita y nos mandó un correo excusándose porque no se encontraba muy bien. Desde aquí nuestros ánimos para que se reponga prontamente.
Se trataba de hacer una ruta básandonos en otra que hizo José Manuel en junio del 2007, en la que saliendo de la Fuente de la Calzada, se seguía el Barranco de Aguas Negras hasta la Fuente de la Parra, se subía al Pico Espadán, se bajaba por el mismo sitio hasta la fuente, se continuaba por el Barranco Malo hasta casi el inicio de la ruta, se dirigían a visitar la Cueva del Estuco y retrocedían por el mismo sitio hasta el inicio.
Esta ruta la calificaron como algo durilla y llevaba otra preparada, combinando ésta con otra por si cuando llegábamos a la Fuente de la Parra decidíamos no subir el Espadán. Todo dependía de cómo se encontrara el conjunto del grupo. Al final sí que subimos y una vez arriba modificamos la ruta original e incluso la segunda que llevábamos cargada, ya que contando con dos muy buenos conocedores de la zona como son Kiquet y Juan Carlos, nos fuimos consultando y decidiendo sobre la marcha lo que convenía hacer a continuación y la verdad es que el resultado nos gustó a todos.
Habíamos quedado a la temprana hora de las 6 de la mañana en Gilet como punto de reunión, nos repartimos en los coches y tomamos la A-23 en dirección a Teruel. A la altura de Segorbe salimos por la derecha tomando la CV-215 hasta Algimia de Almonacid, donde nos esperaban Jose y Mari. Continuamos por la CV-215 en dirección a Alcudia de Veo y llegamos a la Fuente de la Calzada.
Siempre resulta un poco extraño pasar por esos pueblos dormidos y que seguirán así aún durante algunas horas, mientras nosotros ya estamos deambulando por el mundo, totalmente despiertos y con el esfuerzo del madrugón en busca de nuevas sensaciones... Es como si fueramos las Reinas de la Noche.
A las 7 comenzamos a andar buscando la senda del barranco de Aguas Negras. Este barranco es muy frondoso y fresco y da gusto andar por él. En continua pero leve subida fuimos remontándolo, a un ritmo muy bueno que, primero impuso José Manuel Junior, que se colocó en cabeza, después Juan Carlos y hasta Jose estuvo tirando algunos ratos.
Llegamos a la Fuente de la Parra, llamada así por... no sé. En realidad debía llamarse Fuente de la Higuera.
Aquí vimos que nos encontrábamos todos bien y decidimos subir al Espadán. El tiempo acompañaba, pues el ambiente era fresco y de vez en cuando soplaba una ligera brisilla. Además, una leve neblina nos protegía del sol.
En animada charla continuamos el ascenso.
Llegó el momento de abandonar la pista para subir por una senda bastante empinada.
Y llegamos hasta los últimos tramos, donde comprobamos que es que ya no se podía subir más.
Con la mirada perdida en tan maravillosos paisajes y con la sensación de encontrarse en ese momento por encima de muchas cosas, Mª Ángeles se quedó sin aliento... "y recordad siempre esto: La vida no se mide por las veces que respiras, sino por los momentos que te dejan sin aliento..."
Tras ese momento de silencio en que cada uno mira al infinito y a saber en qué leches estará pensando, modificamos el recorrido y nos dirigimos a visitar el vértice geodésico. Desde allí, en la primera imagen, podíamos ver dónde habíamos estado hace unos instantes.
Habíamos decidido almorzar en la Nevera porque íbamos muy bien de tiempo y de ganas de devorar Sierra, así que nos dirigimos por senda hasta el lugar. Cuando llegamos había unos cuantos senderistas en fase de contemplación. La contemplamos también levemente, ya que es menos vistosa que otras con las que nos hemos encontrado y seguimos un poco más hasta la zona recreativa que hay junto a la carretera, donde nos sentamos en una de las mesas y sillas de piedras.
Estando comprobando si el vino de mi nueva bota pasaba los exhautivos controles de calidad, se nos acercó un personaje que estaba haciendo una encuesta a las personas que utilizaban el Parque Natural de Espadán y nos preguntó sobre nuestras actividades y las posibles mejoras o sugerencias que queríamos aportar. Elegimos a Juan Carlos como portavoz, aunque participamos todos en las respuestas.
Una vez acabamos con el almuerzo nos dirigimos por pista hacia la Cueva del Estuco, encontrándonos por el camino con alguna que otra cueva excavada en las rocas.
Llegamos a la entrada de la Cueva que en un primer momento no es más que un agujero y comenzamos el descenso. Cuidando de no darse en la cabeza fuimos bajando todos, ayudándonos por una cuerda que hay allí enganchada y que llega hasta abajo.
Comentaban los que habían estado más veces, que en esta ocasión se encontraba menos iluminada que en otras ocasiones. La verdad es que estaba bastante oscuro. Una pena por las fotos, pero así parecen más fantasmagóricas. En el interior, por tramos estaba la bajada levemente mojada y había que ir con cuidado de no resbalar.
Llegamos al fondo de la amplia sala, donde disfrutamos de la sensación de estar en tan extraño entorno y del fresquete que hacía allí. En la tercera imagen se pueden apreciar las estalactitas que penden del techo y que al ser tan numerosas, su apariencia parece ser que es la que da nombre a la cueva.
Cuando hubimos rellenado nuestras sacas con todas las sensaciones e imágenes visuales que cada uno quiso acarrear, salimos a la superficie y nos hicimos la foto de grupo en la misma entrada de la cueva.
Emprendimos el regreso. El día ahora ya era mucho más claro y lucía un sol radiante, aunque el ambiente no era de calor. Haciendo sitio todavía en nuestras retinas para albergar algunos paisajes más, llegamos al lugar donde teníamos los coches, en la zona recreativa de la Fuente de la Calzada. Nos lavamos y refrescamos en la fuente y estuvimos charlando un poco en una de las mesas.
A las 11:30 horas dimos por finalizada esta maravillosa jornada, nos despedimos unos de otros y como habíamos coincidido 5 de los 7 que nos vamos este lunes a subir el Aneto, nos desearon suerte en la travesía pirenáica.
Un saludo a todos y hasta la próxima.
Podéis descargar el track haciendo pulsando aquí: PABLOONCE.
Pues eso: ¡¡¡¡Hasta el "Infaneto".... y más allaaaaaaaaaaa!!!!
Hola Pablo: Primero que la subida al Aneto sea lo mas feliz posible y que disfruteis de ella.
ResponderEliminarSegundo que lastima no haver podido acompañaros el sabado pasado por la sierra Espadan, y asi estar con José y Mari que hace un siglo que nos los veo, pero estaba en otros menesteres con la familia, y con ella marcho el 12 a los Alpes, a la zona del MontBlanch, donde estare una semana.
Nos vemos en septiembre y buena ascensión al Aneto, los Pirineos son Magnificos.
Juan Abad