0050 - Vértices Geodésicos C.V.: Replana (1229 m) / A+ 518 m / 14,57 km

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"Ave marrrría"

Esta semana la ruta la propuse en domingo porque había gente que tenía compromisos el sábado. Se trataba de subir al Vértice Geodésico nº 50 en altura de la Comunidad Valenciana, Replana, con 1229 m de altitud, situado en el Término Municipal de Castalla, Alicante.

Recorreríamos por la cresta la Sierra de la Argüeña casi en su totalidad, terminándola con una bajada de nueva factura hasta la Rambla de la Majada Honda. A continuación volveríamos a subir haciendo el recorrido inverso por la Sierra paralela de El Chocolate. Haríamos la ruta en sentido contrario de las agujas del reloj.

Aquí os dejo un vídeo de una simulación en 3D que preparé para la ruta prevista en un principio:

Saldríamos desde las Casas de Planes en dirección Oeste subiendo de inicio y llegaríamos al Collado de las Hermosas y a continuación al Vértice Replana. Seguiríamos por la cresta haciendo pequeños toboganes, pasando por las Penyas del Quixal. Más adelante veríamos cómo estaría para bajar por la ladera y si no nos gustara tomaríamos otra bajada un poco más allá y llegaríamos a la Rambla de la Majada Honda. Giraríamos entonces hacia el Este y subiríamos a la Sierra de El Chocolate pasando por la Penya dels Col.legials. Para finalizar, nos meteríamos por dentro del Barranc del Saltet durante un buen tramo, que nos dirigiría de vuelta a los coches.

A la cita acudieron Mari y Jose, Manuel Carlos y un servidor. Cuando nos dirigíamos al punto de inicio y a la altura de los depósitos de agua que abastecen a Castalla, nos encontramos con una puerta metálica en medio de la pista y un cartel que prohibía el paso diciendo que era una finca particular. Todavía quedaba un km para llegar al punto de inicio previsto. Vimos llegar un coche. Jose le preguntó y le dijo que iban a venir cazadores para tirar al pájaro.

En ese momento consulté los mapas para reorganizar la ruta. Partiendo de aquí, trataríamos entonces de ir por el Baranc Ample hasta conectar con el Barranco del Negro, siendo éste de más categoría como lo indicaban la proximidad de las curvas de nivel. Una vez allí lo seguiríamos hasta unir con nuestro track.

Acompañados por la oscuridad y cuando aún no habían tocado las 7:30 nos pusimos en marcha y cuando fuimos viendo algo bajamos al barranco.

Enseguida conectamos con el Barranco del Negro, que nos salía por la derecha y al girar la primera curva nos dimos de cara con otro inconveniente. Un salto de más de 15 metros de altura se aparecía ante nosotros impidiéndonos también el paso.

Decidimos subir por la empinada ladera de la izquierda, avanzar y cuando lo hubiésemos pasado volver al barranco. Así lo hicimos y cuando bajamos, el lecho nos ofreció formas muy curiosas.

Una hora más tarde enlazamos con nuestro track y, manteniéndonos alejados de las Casas de Planes por si acaso, tiramos para arriba. Encontramos retazos de senda que se perdían y para intentar caminar mejor, cambiamos de ladera, ya que en el mapa topográfico estaba marcada una pista por allí. Desde lejos vimos trozos, pero cuando estuvimos en ella comprobamos que los romeros y las aliagas la tenían completamente invadida y, aunque intentamos subir algo, cada vez se ponía más difícil, por lo que optamos por regresar a la ladera anterior.

Subimos un poco más y nos encontramos con una senda que se nos antojó entonces como una autopista, de lo bien que se caminaba en comparación a lo de antes. Llegamos al Collado de les Fermoses y nos entretuvimos viendo un panel indicativo de la reserva de flora. Desde arriba vimos que nos hubieran faltado de 20 a 30 metros de pinchoso paso para llegar a la pista.

Ahora teníamos una subida empinada por pista. Un poco más allá, el track se desviaba a la derecha para acortar una lazada de la pista. Lo tomamos y sí que recortamos la lazada, pero a costa de subir más desnivel de golpe.

Una vez arriba la recompensa la tuvimos en el paisaje tan limpio que las fuertes rachas de viento que hacía en lo alto habían dejado.

Llegamos al vértice y nos dispusimos a almorzar en unas piedras que habrían utilizado otros senderistas para los mismos menesteres y que estaban situadas a cubierto del viento. Allí saqué el mapa y comenté al grupo que como el inicio de la ruta había sufrido cambios, la ruta prevista también tendríamos que modificarla y les dije que estaba pensando en coger una senda que, después de les Penyes del Quixal, bajaba hacia una pista y desde allí comenzar el regreso, dejándonos por hacer la mitad de la ruta original. Todos estuvieron de acuerdo con la propuesta, especialmente uno de ellos.

Podíamos ver a lo lejos la Sierra de Salinas, fronteriza con Murcia, donde estuvimos hace unas semanas.

Detrás de Jose se apreciaba también la Sierra de Onil y el vértice Reconco, que será un próximo objetivo.

El cielo estaba plagado de nubes algodonosas y parecía que los Simpsons iban a aparecer tras las matas de un momento a otro.

Llegamos a la pista, donde nos encontramos con nuestro track, que vendría de recorrer la ruta que nosotros nos habíamos dejado por hacer y volví a consultarles sobre si a partir de aquí continuábamos por el trak, ahora que la habíamos recortado bastante o si emprendíamos el regreso combinando pista a pista hasta llegar al coche. Todos convinieron en que preferían seguir por el track, que sería más divertido que las pistas.

Nos internamos en el Barranco del Saltet, casi en su inicio y fuimos por él muy entretenidos. Unas veces se encajonaba y otras se abría un poco. A veces teníamos que pasar entre las ramas y otras salirnos y volvernos a meter cuando encontrábamos algún pino caído o algún salto no franqueable.

Éstas han sido unas imágenes en las que podéis ver lo bien que nos lo estábamos pasando, aunque el circular por estos lechos en los que no paras de variar los ritmos y tanto subes ahora como bajas o vas a la derecha o a la izquierda, cansan ¿Qué digo cansan?... ¡¡agotan!!, jeje, aunque me sé de una a la que le encantaría haberse cansado por aquí.

Terminamos con el largo Barranco del Saltet y enlazamos con el Barranco del Negro por donde habíamos venido esta mañana. Lo recorrimos hasta el lugar donde se encuentra el salto grande y volvimos a subir por la ladera para bajar una vez superado por la derecha. Vimos el Barranc Ample, pero en lugar de meternos por él, subimos a unos campos que se veían en la ortofoto y que facilitarían nuestro avance en esos últimos metros.

En la última imagen tenemos a "Marrría", toda contenta como dando las gracias por haber salido al final de los barrancos y se le oía entonar el "Ave Marrrría" de Schubert al más puro estilo de la genial Mirusia... Snif, si es que me emociono y todo recordándolo (y oyéndolo).

Terminamos la odisea a las 15:00 horas y fuimos hacia Castalla para buscar una fuente, pero en un parque que encontramos y que tenía mesas y paelleros, había hasta 3 fuentes pero todas sin grifo, grrrr.

Jose se ofreció a que procediéramos al baño de pies con cerveza de la neverita, pero lo pensamos mejor y nos las bebimos, dando por finalizada otra divertida ruta.

En esta marcha yo estrenaba botas. Son las que os pongo en la imagen, unas Bestard Potes, que en una ruta como hoy, que parece hecha a la medida para probar botas, han respondido de maravilla en todos los terrenos. Tengo pendiente incluir en el menú del blog una sección de "Artículos", en los que os hablaré de ellas e iré poniendo mis impresiones sobre algunos temas de material.

Los datos de "tiempo parado" y "velocidad media en movimiento" que aparecen en esta gráfica no son correctos. El programa te marca como parado cuando vas a bajas velocidades, como ocurre en el interior de los barrancos, aunque de todas formas esos datos en una ruta como ésta tienen poca imortancia.

Un saludo a todos y hasta la próxima.
Podéis descargar el track pulsando aquí: PABLOONCE