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A continuación comenzaríamos a bajar por pista hasta que nos
saliéramos por la izquierda por una senda que recorre el Barranco del Agua que
nos iría llevando hacia la zona de las Cuevas de la Garita y su cascada. Las
visitaríamos y volveríamos a la población y a los coches.
A la cita acudieron Juan Carlos, Manuel Carlos y un servidor.
Aparcamos en las afueras del pueblo, al lado de la Fuente del Barrio, en la que nos refrescaríamos a la vuelta.
A la cita acudieron Juan Carlos, Manuel Carlos y un servidor.
Aparcamos en las afueras del pueblo, al lado de la Fuente del Barrio, en la que nos refrescaríamos a la vuelta.
Salimos del pueblo, en principio siguiendo las marcas de PR y comenzamos a elevarnos, teniendo cada vez mejores perspectivas de la población.
Enseguida dejamos el recorrido del PR que sigue por la derecha y nosotros cogimos una senda que sale por la izquierda y que sube más directa. Así variaríamos algo el recorrido de otras veces.
El día era espléndido para caminar aunque a lo lejos podía observarse todavía la bruma matinal.
Levantando la vista podíamos localizar el gran abrigo de la Cueva Negra. Le haríamos una visita.
Nos desviamos a la altura de esta señal para ir a verlo. Después tendríamos que volver de nuevo aquí.
Es un gran abrigo convertido en corral de ganado. Lo vimos desde fuera y no nos metimos ya que no hacía falta. Volvimos a la senda y coincidimos más adelante con una pista.
Abandonamos de nuevo la pista para coger otra senda que nos continuaría subiendo hasta nuestro destino, el Pico Ropé.
El Pico estaba fuertemente vigilado por un par de cabras de buen tamaño, a los que nuestra presencia no arredraba y les costó abandonar su mirador.
Estupendo mirador. Por eso no se iban las cabras.
Llegamos a donde estaba el vértice geodésico. Digo "estaba" porque ya no está. Ya había leído en una crónica que había desaparecido y sólo queda la base cuadrada de hormigón.
De todas formas nos hicimos la foto en el lugar del vértice geodésico. Menos mal que tenemos la imagen de cuando sí que estaba. Da cierta pena que se pierdan estos símbolos que muchas veces sirven de excusa para hacer una buena ruta.
Imagen de febrero de 2012, cuando lo subimos con los Más de Mil.
Continuamos hasta pasar por la derecha de la caseta forestal porque sabíamos de otras veces que allí había una mesa de piedra con asientos ideal para almorzar.
Vistas desde el lugar del almuerzo. Espectacular.
Después del gratificante momento, saludamos a la Agente forestal y continuamos ahora bajando por la pista.
Ahora caminábamos con la vista del Barranco del Agua a nuestra derecha. La pista nos haría más tarde cambiar de vertiente y circular por su derecha.
¡Ojo! porque a la altura de un pequeño campito sembrado de cereal para las perdices hay que desviarse por una vieja pista por la izquierda en descenso que nos cambiaría de vertiente.
Al poco hay que estar de nuevo atentos a una senda que sale por la derecha en descenso y que va acercándose al cauce del barranco sin llegar a tocarlo.
Pasamos por la indicación de La Fuente Gorda. Es un pequeño recorrido de unos 50 m de ida y vuelta que vale la pena.
La fuente tiene este año un agua fresquísima y buena, donde bebimos y rellenamos nuestras botellas.
La senda volvió a cambiarnos de vertiente de nuevo, circulando otra vez por la derecha del barranco, ahora por una pista. Más adelante, aunque se puede seguir por ella, nos salimos por un caminillo por la derecha y fuimos atravesando los campos de almendros hasta unir de nuevo con la pista que ya nos asomaba a la gran cascada de las Cuevas de la Garita.
Estaba en todo su esplendor.
Queríamos meternos detrás de la cascada y fuimos subiendo por su izquierda.
Justo encima de la cascada se encuentra una de las cuevas de más recorrido del conjunto. No las visitamos todas esta vez porque ya habíamos estado aquí con anterioridad.
Entramos dentro y fuimos atravesando su oscuridad porque sabíamos que al final había una ventanita desde donde se ve la cascada.
Aquí está la ventanita y la visión de la cascada, pero lo que nosotros queríamos era verla de cerca, así que salimos y bajamos un poco para realizar el ataque.
Me quise hacer una foto en el mismo lugar que en 2009.
Nos pusimos a su altura y trepamos por unas rocas, acercándonos a su base y por detrás de una piedra conseguimos pasar detrás de la cascada, donde los Piratas escondían sus tesoros.
Aquí estamos, dentro de la cascada, rodeados de gotitas por todas partes, ¡¡¡Yahoooo!!!
Íbamos saliendo de la preciosa cascada cuando oímos un pequeño zumbido. Se trataba de un "Dron", cosas de las modernidades, que estaba parado flotando observándonos.
Bajamos de la zona de las cuevas y fuimos encadenando pistas dirigiéndonos al pueblo.
Llegamos a los coches y a la Fuente de la Gitana, de la que salía abundante agua de sus tres chorros, uno para cada uno. El agua estaba buenísima, no nos cansábamos de beberla, como hicimos hace un rato en la Fuente Gorda y tan fresca que nos dolían los pies al refrescarlos.
Una ruta sencilla pero con unas vistas desde lo alto impresionantes. El lugar del almuerzo en la mesita de piedra, muy gratificante y los otros alicientes, como las Cuevas de la Garita, la fenomenal cascada y las dos fuentes, hacen que la ruta sea muy amena.
En wikiloc salen esta vez unos 800 m de desnivel. No creo que sea tanto.
Un saludo a todos y hasta la próxima.
Podéis descargar el track de la ruta pulsando aquí: PABLOONCE.
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