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Este sábado queríamos celebrar nuestra ruta de Navidad y para ello elegimos hacer la Ruta de los Molinos desde Alborache y añadirle otro recorrido pasando por la Cueva del Turche, dejando de lado la de Las Palomas porque teníamos reserva en un restaurante para comer.
En un día magnífico a la cita acudieron Ángela, Pili, Mari, Quico, Jose, Juan Carlos, Nolo, Manel, Manuel Carlos y un servidor. Y a la comida acudieron además Mª Jesús y Ana. Aparcamos donde está el cartel del inicio de la ruta de los Molinos. Para llegar hay que atravesar la población de Alborache viniendo desde Buñol, se cruza el puente y en el punto Kilométrico 2, unos metros antes de una fuerte curva a la izquierda, nace una pista también a la izquierda y enseguida se ven los carteles de la ruta.
Comenzamos acercándonos al río y siguiendo la senda que nos haría cruzar bastantes veces el agua a través de numerosos puentecitos.
Este es el azud, que no hay que cruzar, sino seguir por la margen derecha según vamos.
Un área recreativa con mesas, que a la vuelta estaba llena.
Y llegamos al Charco Azul de esta ruta, una poza de buenas dimensiones, con el agua en calma y cristalina como un espejo.
Continuamos y la senda nos hizo subir un poco para dirigirnos al Charco Mañán.
Allí abajo estaba esperándonos. Como había llovido la noche anterior esta bajada estaba bastante resbaladiza y tuvimos que extremar las precauciones.
Visitamos el Charco y volvimos a donde habíamos bajado para continuar caminando por el borde de esta pequeña acequia.
Atentos más adelante a dejarla y desviarse en descenso por la derecha.
Veríamos de frente la parte alta de la Cueva del Turche con el Mirador. En una ruta anterior cruzamos el río por la parte que se ve a la derecha en la imagen.
Allí mismo encontramos un lugar estupendo para almorzar.
Continuamos ahora descendiendo hacia el paraje de la Cueva del Turche.
Apenas caían unas gotas por la cascada, pero la fuente si que manaba bien. Se ha asentado allí un grupo de patos muy amigables.
La foto de grupo de Navidad no podía faltar.
Salimos de allí en busca de la carretera, que cruzamos y tomamos una pista que circula por su lateral un poco más adentro y más tarde giramos hacia la izquierda en dirección a otro tramo interesante de la ruta.
La senda atraviesa un cañar muy tupido que se puede superar gracias a la senda.
Y en el que hay que agacharse en varios puntos.
Pasamos en ese entorno por la Fuente de la Mezquita, que seguro que pasó mejores días y de la que no caía agua.
Por fin salimos del lecho del barranquito por una senda por la derecha, que nos llevaría a la zona del Molino Galán.
Y después continuamos por la pista que nos llevaría a unir con el recorrido de la ruta de los Molinos que comenzamos a primera hora y que daría fin a esta ruta en forma de raqueta.
Un saludo a todos y hasta la próxima.
Podéis descargar el track de la ruta pulsando aquí: PABLOONCE
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