08-GR 7 - 8ª etapa del Gr7 Comunidad Valenciana: de Andilla a Bejís / A+576 m / 21,77 km

.
"Moras y fuentes"

Esta semana acompañé a Kiquet en su 8ª etapa del GR 7 a su paso por la Comunidad Valenciana. Se trataba de recorrer el tramo desde Bejís hasta Andilla (o viceversa). Como solemos hacer en estas rutas lineales, nos repartimos en dos coches y uno fue a Bejís y otro hacia Andilla. Cada grupo empezaría su ruta desde ese punto y cuando nos cruzáramos nos cambiaríamos las llaves de los coches.

A la cita acudieron: Kiquet, Carmen_K, Miguel, Jose y Mari, Manolo Moliner, Juan Carlos, Manuel Carlos y un servidor.

En una mañana en la que se preveía la posibilidad de un 30 % de lluvias nos reunimos en el punto de quedada en La Eliana y, protegiéndonos de la llovizna bajo la marquesina de una parada de autobús, saboreamos unos pasteles acompañados con mistela, cortesía de Jose que celebraba su cumpleaños.

Nos dirigimos todos hacia Alcublas, donde haríamos el cambio de los coches y desde allí cada uno se dirigió a su punto de inicio. Nuestro mini grupo suele hacer la ruta al revés para que Kiquet la pueda hacer en el sentido "oficial" y estaba compuesto por Juan Carlos, Manuel Carlos, Manolo Moliner y el que relata estos hechos.

Llegamos a Andilla con las primeras luces del alba y sin rastro de lluvia reciente ni inminente y, siendo las 7:20, comenzamos a caminar. Habíamos aparcado el coche junto al lavadero para que cuando llegaran los otros se pudieran refrescar.

Fuimos siguiendo las marcas por pistas y sendas hasta que divisamos a lo lejos la Ermita de Bardés. Aquí decidimos salirnos del carril blanqui rojo y tirar todo recto por una senda que ya conocíamos y que nos es más agradable que la pista.

Probamos el agua de la fuente que hay junto a la Ermita pero al tener grifo y no ser "corriente", no estaba fresca.

Continuamos por la pista hasta que llegamos al Collado de la Salada.

Un poco más allá pasamos por la Fuente de Matamachos, que es un abrevadero con un pequeño chorro de agua y Manuel Carlos y yo estuvimos recordando retazos de la ruta que hicimos por aquí cuando unimos el pico Peñaparda con las Peñas de la Juliana en una dura ruta circular.

Durante todo el camino íbamos comiendo las moras de las zarzas que lo bordeaban. Comimos tantas que ya nos permitíamos elegir sólo las mas gordas. Las hojas de los chopos ya empiezan a cambiar de color y muestran ahora un verde claro y brillante como si estuvieran brotando en primavera.

Enfilamos el Barranco del Quiñón siguiendo las fitas y las marcas, pero hubo un momento en que el GR 7 se salía del barranco un tramo y circulaba paralelo unos metros más arriba. En lugar de ello, nosotros no vimos la desgastada marca oculta por las hierbas y continuamos rectos. Menos mal que oímos las voces del otro grupo que circulaba unos metros más arriba, ya que de lo contrario nos hubiéramos cruzado sin vernos (y sin habernos intercambiado las llaves). En realidad estaba previsto almorzar juntos cuando nos cruzáramos y nuestro GPS estomacal ya nos iba avisando de la proximidad del momento.

Volvimos unos metros sobre nuestros pasos para encontrar el punto del desvío que nos habíamos pasado y así juntarnos con los demás y allí mismo nos dispusimos a almorzar. Nos dijeron que, de todas formas, si podíamos, que continuáramos por el barranco, ya que por donde habían venido ellos se habían pinchado con las aliagas.

Dicho y hecho, decidimos continuar con nuestro leve error barranquil y seguir por el lecho, que estaba bastante limpio y más adelante ya recuperamos el trazado oficial cuando el GR se cruzaba de nuevo con el arroyo. En un momento oímos agua y nos acercamos por una corta sendita que bajaba y vimos una buena poza, que de haber hecho más calor.....

Unos minutos más tarde vimos otra poza, que ésta sí que no sé cómo la dejamos escapar y no nos metimos en ella. Un poco más tarde la senda llega a la carretera donde ésta hace una pronunciada curva. Allí tomamos la parte en ascenso y enseguida tuvimos a la vista la población de Arteas de Arriba.

En un punto alto de la carretera se podía ver a la derecha Arteas de Arriba y a la izquierda Arteas de Abajo.

Al cruzar la frondosa vaguada para llegar a Arteas de Arriba pasamos por el lavadero con su fuente. Cruzamos el pueblo y tomamos la carretera. Hay un momento en que el GR la abandona por la derecha y nosotros lo seguimos pero es recomendable, en mi opinión, hacer este tramo entre los dos pueblos por la carretera, ya que la distancia es corta y la senda está mal, poco pisada y bastante pinchosa.

Llegamos a la otra Arteas, la de abajo. Bonito conjunto de casas que intenta conservar un aire agradable y pasamos por dos fuentes cuya agua estaba muy fresca. Aquí tenéis una foto de la segunda, a punto de abandonar el pueblo. Lo hicimos por una senda con un ascenso bastante pronunciado que nos llevaría a enlazar con una pista. Y como "todo lo que sube, baja" (menos el precio de las gasolinas) continuamos ahora en un continuo y leve descenso por la pista que nos llevaría, sin más aditamentos, hasta Bejís.

A las 12:50 llegamos al coche, que nos habían aparcado "estratégicamente" junto a la fuente y abrevadero que hay al lado del acueducto. Esta fuente tiene un agua fresca y de muy buen sabor, que no tiene nada que envidiar a la de la Fuente de Los Cloticos. En ella nos refrescamos, bebimos y procedimos con nuestro refrescante baño de pies.

Y a la sombra de los árboles nos tomamos nuestra merecida cervecita y emprendimos el regreso, despidiéndonos hasta la próxima de esta ruta que ha tenido más alicientes que la anterior etapa, sobre todo por la presencia de agua y fuentes, que en esta época del año se agradecen.

Un saludo a todos y hasta la próxima.
Podéis descargar el track pulsando aquí: PABLOONCE